La primera vez que oí hablar sobre el Yoga recuerdo que el "concepto" no me quedó nada claro, pero también recuerdo que algo de aquello que escuché me llamó muchísimo la atención y se quedó guardado en mí como algo pendiente de investigar. Recibí mis primeras clases en el 2000 mientras estudiaba en Francia, pero mi cabeza estaba en otro lugar y no llegué a ser constante ni a conectar en aquel momento. Estaba estudiando Biología y creía que quería dedicarme a ello. Y así transcurrieron varios años más, mientras seguía estudiando varios máster en educación y trabajando en lo que iba saliendo. Fue en el 2012 cuando me decidí, por fin, a practicar asiduamente y, hoy en día, se ha convertido en pilar fundamental de mi vida.
Comencé practicando un yoga suave, poco postural y muy meditativo que me llevó a descubrir todo un mundo dentro de mí. Sin embargo, mi carácter inquieto me llevó a probar otros estilos. Tras varias intentonas y pruebas en diferentes escuelas, conocí a Itziar, hoy en día mi mentora y amiga, quien me descubrió un estilo de yoga más dinámico, más potente, más físico, más fluido, pero no menos meditativo. Era lo que necesitaba en aquel momento. Desde entonces, práctico Hatha y Vinyasa Yoga y en el camino he ido descubriendo otros estilos que también me apasionan y me enriquecen como el Yoga Restaurativo o el Yoga Nidra.
Desde que descubrí el yoga, me he dado cuenta de que soy capaz de más de lo que creía, tanto a nivel mental, emocional como físico. Me ayuda a observar con mayor perspectiva, a poner mayor intención en mis objetivos, a ser más paciente y a ser mejor persona conmigo misma y con los demás. Es un instrumento valiosísimo que me ayuda en mi camino de búsqueda de claridad, comprensión, consciencia y equilibrio.
Es por eso que, en 2016, decidí que además de practicarlo, quería también transmitirlo.
Para ello comencé a formarme como profesora:
Mi primera formación de 200h fue en Yoga Studio Pamplona con Marta Baena y unos profesores excepcionales como Julia Zatta (Anatomía) y Naren Herrero (Historia, Tradición y Mitología del Yoga).
Tras esta primera inmersión, me formé en la AIPYS como profesora durante 400h.
A partir de ahí comencé a practicar y formarme en estilos como Yoga Nidra con Ezequiel Anguizola o Marta Carrascal, Inside Flow con Young Ho Kim y a profundizar en la Anatomía Aplicada al Yoga con Julia Zatta y FisiomYoga y a empaparme de otros profesores y maestros como Andrei Ram, Simon Park, Angelo Cecchi, entre otros. Es un camino de profundización continua que me encanta.
En 2017, Itziar me dio la oportunidad de comenzar mi andadura como profesora en Yoga Shala Donostia, donde me siento como en casa.
Hoy día, además de seguir descubriendo y adaptando mi práctica personal, imparto clases de Hatha y Vinyasa Yoga, Yoga Restaurativo y Yoga Nidra. Además de acompañar a nuevos caminantes en la andadura de la instrucción de Yoga.
Para mí, es un placer poder compartir contigo lo que el Yoga me aporta día a día y acompañarte en el camino.